La barandilla de La Concha es uno de los símbolos más representativos de la ciudad. Podemos encontrarla en distintos suvenires de la ciudad. Y cada día hay alguien sacándose alguna foto en los más de mil metros de barandilla que van desde el Palacio Miramar hasta el Club Náutico de San Sebastián. Pero la barandilla esconde un pequeño secreto, y es que una de sus piezas está girada: a pesar de que la barandilla está diseñada con las flores orientadas hacia el paseo, hay una pequeña pieza afortunada que está mirando hacia la bahía. ¿Le gustaría localizarla? Una pista: está frente a nosotros.